La Nuda Propiedad de tu vivienda, la llave a una mejor calidad de vida
En Grupo Retiro nos preocupamos por mejorar la calidad de vida de nuestros mayores a través de soluciones como la Hipoteca Inversa, la Renta Vitalicia Inmobiliaria, la Venta de Nuda Propiedad o la Venta con Alquiler Garantizado.
Cuatro conceptos novedosos para mejorar la calidad de vida de las Personas Mayores una vez han alcanzado la edad de jubilación; y que cobran cada vez más relevancia, sobre todo, dado las últimas noticias de actualidad sobre la polémica de la subida de las pensiones por parte del gobierno español.
Además, la solvencia económica y la calidad de vida de cara al futuro es uno de los temas que más preocupa a la sociedad en general.
¿En qué consiste la Renta Vitalicia Inmobiliaria?
Se trata de un contrato formalizado en Escritura Pública ante notario, mediante el cual las Personas Mayores perciben una renta mensual durante el resto de su vida, a cambio de la Venta de la Nuda Propiedad de su vivienda, pero manteniendo en todo momento el uso y disfrute de la misma.
Al contratar la Renta Vitalicia Inmobiliaria, la Persona Mayor no tiene que asumir ningún tipo de gastos, honorarios ni impuestos pues la totalidad de los mismos, incluida la plusvalía municipal es a cargo del comprador.
¿Y sabes en qué consiste la Venta de la Nuda Propiedad de la vivienda?
Jurídicamente se trata de la misma transacción, es decir, se vende la nuda propiedad d y la persona mayor conservará el usufructo de su vivienda. Es decir, tiene el derecho de seguir viviendo en ella durante toda su vida.
La diferencia frente a la Renta Vitalicia Inmobiliaria, es que en este caso la persona mayor percibe el precio establecido por la venta de la nuda propiedad en un solo pago en lugar de mediante el cobro de rentas mensuales.
En este caso, la Persona mayor asumirá a su cargo el impuesto de plusvalía municipal.
la Renta Vitalicia Inmobiliaria o la Venta de la Nuda Propiedad de la vivienda pueden ser la llave para una mejor calidad de vida tras la jubilación y además se libra para toda la vida de determinados gastos de la vivienda como el IBI, las derramas extraordinarias de la comunidad o el seguro de continente del hogar.